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sábado, 9 de junio de 2012

“Es la economía, estúpido”


  


Por Lucio Agustin Torres *


Esta, fue una frase muy utilizada en la política estadounidense durante la campaña electoral de Bill Clinton en 1992 contra George H. W. Bush (padre), que lo llevó a convertirse en presidente de los Estados Unidos. Luego la frase se popularizó como: «es la economía, estúpido» y la estructura de la misma ha sido utilizada para destacar los más diversos aspectos que se consideran esenciales.
En el Perú, a raíz de los acontecimientos de violencia en Espinar (Cuzco) y Conga (Cajamarca), dos de doscientos conflictos sociales dejados por el gobierno, de: “El perro del hortelano” política implementada en el quinquenio de Alan García. A raíz de los acontecimientos de violencia, digo: El primer ministro Valdés a señalado, que en el Perú, los que protestan por los conflictos sociales mencionados, sacando de contexto a Jorge Basadre, lucido intelectual del siglo pasado, quienes protestan dice Valdés, son:”podridos, congelados e incendiados” que destruyen el País. Eduardo Gonzales, sociólogo peruano residente en Nueva York, a escrito Basadre, agredido (1) y sobre el tema nos dice: “Basadre, por supuesto, separaba a los Podridos, Congelados e Incendiados, en tres tipos distintos. Los Podridos son los corruptos, los ideólogos falsos, que encubren sus ambiciones menudas con grandilocuencia, y mantienen al país en la permanente frustración. Los Congelados son completamente distintos: les importa poco lo que ocurra, aislados en el pequeño círculo de los privilegiados, y no se dignan siquiera en dirigirse al resto. Los Incendiados son los que se rebelan contra los dos anteriores, pero cegados por la rabia estéril, desperdician su energía en violencia, incapaces de construir patria.
Es significativo que el Sr. Valdés unifique los calificativos que Basadre separaba.
Sólo hay dos explicaciones posibles: la primera es que él mismo no las ve como tipos separados. Al fin y al cabo él representa bien los deméritos de las tres categorías: el acomodamiento de los podridos, la soberbia de los congelados y la matonería de los incendiados. En esta interpretación, lo de Valdés es casi una confesión de parte, o un acto fallido. La segunda explicación es que ve las categorías como fusionables porque su jefe, el Sr. Humala demuestra que se puede pasar de Incendiado a Podrido en cinco años, y de Podrido a Congelado en cinco meses.”
Sin embargo el tema de los conflictos sociales, es económico y sesenta por ciento minero, la defensa del estado de derecho, es la defensa al modelo primario-exportador extractivista, que se implemento desde Fujimori y se mantiene hasta la fecha. Tengo algunos números que deseo compartir. Son de la Asociación de Exportadores (ADEX) no extremista, sin duda.
Las exportaciones clasificadas en tradicionales (productos mineros, agrícolas, hidrocarburos y harina de pescado determinados por el Decreto Supremo 076-92-EF) No-tradicionales (las demás partidas arancelarias no señaladas en esa norma y son productos que tienden a tener un mayor valor agregado)
En 2010 las exportaciones tradicionales fue el (77.4%)   y las No- tradicionales (22.6%) cuyo monto alcanzado en total fue: US$ 35, 075, 817,599 de este cien por ciento, 60.5% fue del sector minero.
Otro dato interesante es que: de las 7,036 empresas dedicadas a la exportación, 563 pertenecen a la gran empresa, a su vez, la gran empresa representa el 95% del valor exportado, y de las cincuenta principales empresas exportadoras, Yanacocha, es la tercera más importante.(2)  Ahora se entiende que el Presidente de los de “Abajo” gobierne para los de “Arriba”.
Es la Economía, estúpido. Por ello “La promesa de la vida peruana, dice Basadre, no es la quimera del oro cajamarquino que animó a los conquistadores; ni una libertad abstracta que no se apoye en el progreso material. La promesa es el ideal realizable de “una vida sana, próspera, fuerte y feliz” con nuestros hermanos, en el extraordinario territorio que tenemos la responsabilidad de cultivar para nuestros hijos. “(3)

Referencia
1-     Basadre,agredido




* Director del Grupo Editor del Norte 

miércoles, 21 de marzo de 2012

¿A qué se debe la polarización social en el Perú?


Por Lucio Agustín Torres *

Mientras en New Jersey (USA) representantes de la Derecha Bruta y Achorada (DBA) pretenden imponer una agenda política al congreso peruano a través del tema: Distrito electoral para los residentes peruanos en el extranjero. En el Perú a raíz del embalsamiento de los conflictos sociales, dejados por el gobierno de García (229) según datos de la defensoría del Pueblo, desatando protestas y la polarización social  de los pueblos en conflicto: Madre de Dios, Ancash, La Libertad, Piura, Arequipa, Cajamarca, etc.
Las demandas son de diferentes sectores económicos: minería, medio ambiente, agua, agro y derechos laborales entre otros. Analicemos algunas cifras estadísticas del sector que más polarización y debate ha traído los últimos tiempos en el Perú, nos referimos a la minería, y empecemos indicando que es uno de los sectores más beneficiados por los precios internacionales.
Fujimori vendió, a precio de huevo, empresas y yacimientos mineros estatales. Comenzó en 1993 con Hierro Perú a la china Shougan en unos $ 120 millones de dólares. Luego se remató todo el resto.
Shougan compró y hacía utilidades con el hierro a $ 25,20 dólares la tonelada métrica fina (TMF) en 1994, precio que osciló pero se mantuvo en unos $ 27 dólares hasta el 2002. El 2006 subió a $ 53,80 la TMF y el 2010 llegó a $ 100,90, es decir, cuatro veces el precio de cuando compraron. En 1994 se produjo 4.636.628 TMF de hierro y apenas 4.861.155 el 2006. El 2010 subió a 6.042.644 TMF, un 30%, pero el valor de la producción nacional de hierro pasó de $ 261.530.114 el 2006 a $ 628.776.000 el 2010. Aumentó 140%. Monto muy superior al previsto.
El caso del oro y el cobre –75% de nuestras exportaciones mineras– es más significativo. Muchos proyectos mineros auríferos se iniciaron entre 1995 y el 2001. El precio promedio anual del oro estaba entre $ 352 y $ 242 la onza. El 2004 el precio de la onza de oro subió a $ 374 y el 2006, con García, trepó a $ 553 para alcanzar los $ 1.120 dólares la onza el 2010. El precio del oro, sin inversión adicional alguna de las mineras, aumentó en no menos de 500% de lo que previeron los inversionistas.

¿Y el cobre? En 1997 y el 2003 la libra de cobre costaba entre $ 1,07 y $ 0,85 centavos. El 2006 el precio casi se cuadriplicó al llegar a $ 3,15 y el 2010 estaba en $ 3,48, llegando hasta $ 3,90 días atrás. Nada de ello fue esfuerzo de las empresas vía nuevas tecnologías. Vino del alza del mercado mundial, multiplicando sus utilidades: los proyectos mineros peruanos más importantes recuperaron el total de su patrimonio e inversión en unos cuatro años.
El ingreso por la producción minera en el Perú (los nueve principales minerales) entre 1997 y el 2003 fue de $ 32.232 millones de dólares. Pero entre el 2004 y el 2010 fue de $ 126.181 millones. Es decir, ventas casi cuatro veces mayores en los últimos siete años que en los primeros siete por el aumento de los precios. La producción de cobre solo aumentó 2,5 veces entre 1997 y el 2010, y la de oro solo se duplicó. En el resto de minerales fue variable, pero los ingresos por ventas de minerales se multiplicaron.
En otros términos, los minerales producidos entre el 2004 y el 2010 se vendieron por $ 137.262 millones de dólares. Si se hubieran vendido a los precios promedio existentes entre 1997 y el 2003 habrían recibido $ 52.303 millones de dólares. Es decir, las mineras hubieran vendido cerca de $ 84.958 millones de dólares menos.
¿No teníamos derecho los peruanos a participar en una mayor parte de estos enormes ingresos o sobre ganancias, que obtuvieron sin riesgo ni inversión adicional, para atender nuestras necesidades?
Cientos de millones que el Estado dejó de recaudar. De ahí la necesidad de obtener un impuesto a las sobre ganancias, planteamiento cambiado por García, por óbolo minero.
Cuando se dio el debate en el actual gobierno cuestionamos los cambios porque no cumplían con la idea de la sobre ganancia minera ni se acercaban a los montos previstos originalmente, pero el Congreso impuso el procedimiento. Hoy vemos que no se cumplirá con lo dicho, ni en los S/.3, 000 millones de soles por un juego de deducciones tributarias que reducirán el pago de las obligaciones establecidas, tipificadas como costos, del impuesto a la renta que deben pagar las empresas. E hicimos un cálculo para Buenaventura, la minera del grupo Benavides vinculada a Yanacocha. Calculamos la recaudación con la antigua ley de regalías y el impuesto a la renta basándolos en las ventas que el grupo tuvo por S/.599 millones de soles el 2009 y S/.808.4 millones el 2010. Y lo sorprendente es que con la anterior ley de regalías y el Impuesto a la Renta Buenaventura habría pagado S/.124.32 millones de soles por ambos conceptos el 2009, y S/.222.20 el 2010. Pero con las nuevas leyes pagaría S/. 97.48 millones por las ventas del 2009 y S/. 215.2 millones por las ventas del 2010. Es decir pagaría menos con las leyes actuales que con las anteriores. Un absurdo y un abuso. Otras empresas, como Yanacocha, pagarían algo más, pero cifras realmente minúsculas para su movimiento. Por ejemplo, con cifras del 2010 pasarían de pagar impuestos de S/. 874.7 millones a S/. 899.4 millones, es decir, apenas 25 millones de soles más sobre ventas de más de $1,851.8 millones de dólares con un margen operativo de casi 51% para la empresa. Es así como la minería aportará al desarrollo del país. La derecha es insaciable. Ella tiene apetitos materiales y políticos desmedidos. Controla ya casi todas las manijas del gobierno, pero no le basta. Quiere tener en sus manos todos los resortes del poder, del gobierno y del Estado, mientras los sectores en conflicto están en pie de lucha con saldos trágicos de tres muertos y cientos de heridos. Igualito no más el gobierno de la “gran transformación” haciendo de guardián del estado de derecho del gran capital, como los últimos treinta años, en el Perú, Criminaliza la protesta social.
Esta es la verdadera agenda y realidad del País, y una de las razones de la polarización social del Perú.


Director Grupo Editor del Norte. *