Lucio Agustín Torres *
No hay buenas noticias para la economía mundial y así lo expresan las bolsas que tropiezan una y otra vez con la tinta roja. Al parecer, aún no se entiende lo que quiso decir Bernanke cuando habló que la economía vive un momento particularmente incierto, Pues bien, la economía comienza ahora su aterrizaje forzoso, dando cuenta que está más cerca de una nueva zambullida que de la anunciada recuperación.
Los datos de Grecia son una muestra de lo que espera al resto de los países europeos que han adoptado draconianos planes de recortes presupuestarios. Las tiendas están cerrando, los ingresos fiscales están disminuyendo y el desempleo ha afectado a un increíble 60% en algunos lugares. Las medidas de austeridad se han extremado hacia una espiral mortal y el país ha reducido el déficit presupuestario más de la cuenta: 39,7%, y el gasto del gobierno en 10%, mucho más de lo que exigían la UE y el FMI. Esto ha afectado a todos los sectores de la economía del país y el consumo se ha ido a pique, con quiebras y desempleo masivo que van en aumento. Una mezcla de miedo, desesperanza y furia se está gestando en la sociedad griega.
A nivel global, la economía se encuentra entrampada en sus propios paradigmas y mientras no se dé un vuelco desde el interior de la disciplina no habrá plan de salida, ni salida posible. Todas las líneas de crédito se han evaporado y el dinero vive una furiosa volatilidad. Los precios, plataforma central del sistema y el indicador más clave a la hora de trazar proyectos de inversión, viven toda la furia del mercado con sacudidas que dejan en muy mal pie a todos los paradigmas que reforzaron heurísticamente el actual modelo económico: desde las expectativas racionales, a la hipótesis de los mercados eficientes, pasando por todas las herramientas de política monetaria que tuvieron como único objetivo el control de la inflación. Pero… ¿es que acaso la burbuja inmobiliaria no fue una inflación de los precios de la vivienda?
Los malos datos del empleo entregados ayer por Estados Unidos dan cuenta de la gravedad de un problema que amenaza con permanecer largo tiempo. Estados Unidos, la principal economía del planeta, que triplica con su PIB a la economía que ocupa el segundo lugar, no es capaz de generar empleo. Parte de las causas de este problema las vimos en El origen del caos financiero
y del desempleo global, y en Del desorden financiero a la quiebra de Estados Unidos, lo que puede ayudar a comprender lo complejo del problema y por qué no habrá una recuperación real mientras estos desequilibrios persistan. (1)
Ante las señales que indican la recuperación de la economía y del resurgir de los beneficios empresariales, los datos de empleo de ayer cayeron como un jarro de agua fría y hacen pensar que el problema se podría estar enquistando. Las peticiones por desempleo iniciales aumentaron la pasada semana a una tasa ajustada de 500.000 solicitudes, la cifra más alta desde mediados de noviembre de 2009. Así, por segunda semana consecutiva, la realidad superó las previsiones del mercado, más optimistas, que esperaban descensos.
"Hemos tenido incrementos (en las peticiones de subsidio), cuando la mayoría de nosotros pensaba que iban a bajar. El número de gente que reclama las ayudas es ahora perturbadoramente alto", manifiesta el economista sénior de Nomura, David Resler. "Para aquellos que dudaban si iba a ser un periodo largo, eterno, ya no pueden dudar más", añade. (2)
La Reserva Federal (FED) dio a conocer el martes una evaluación negativa sobre la situación económica norteamericana. Al término de su reunión de política monetaria, el banco central estadounidense emitió un comunicado informando que "el ritmo de la recuperación de la actividad y del empleo se desaceleró en los últimos meses". En el centro, la persistencia del desempleo y la no reactivación del consumo.
La mayor economía del mundo creció en el segundo trimestre del año en una proyección anualizada en tan sólo 2,4 por ciento, luego de 3,7 por ciento en los tres meses previos. En tanto, la tasa de desempleo se ubica desde hace dos meses en el 9,5 por ciento.
El déficit comercial de EEUU aumentó sorpresivamente en junio a su nivel más alto en 21 meses, después que se registraran fuertes aumentos en las importaciones provenientes de sus principales socios comerciales.
En junio, las exportaciones de EEUU disminuyeron un 1,3% a US$150.450 millones, tras ubicarse en US$152.440 millones en el mes previo El déficit en el comercio internacional de bienes y servicios fue de US$49.900 millones, lo que representa un ascenso del 19% frente al déficit de US$41.980 millones en mayo, informó el miércoles el Departamento de Comercio.
En este contexto, los economistas se están volviendo más pesimistas acerca de la fortaleza de la recuperación económica en EEUU, pero no creen que las autoridades deberían tomar más medidas para apoyarla, según el más reciente sondeo de proyecciones de The Wall Street Journal. Los 53 economistas consultados, de los cuales no todos respondieron a la totalidad de las
preguntas, presentaron un panorama sombrío de crecimiento moderado y desempleo elevado. (3)
Cuando se habla de recuperación económica, ¿se estará pensando en los ejércitos de millones de personas desocupadas?... ¡No se oye padre!
Director de Blogs Alternativos en la red *
Referencias
1-La economía mundial comienza su aterrizaje… Dinero Blog
2-El empleo de EE.UU. sigue en picada Dinero Blog
3-Encuestas y Economistas revelan un panorama sombrío Dinero Blog
Publicado 21 agosto 2010.