Por Lucio Agustín Torres *
Mientras
en
New Jersey (USA) donde reside la comunidad más numerosa de peruanos en el
exterior, la agenda política de un grupo de compatriotas es la realización de lobby,
conferencias y seminarios para presionar al congreso en Lima, se abra a debate :
“La representación de los peruanos en el exterior”. En el Perú, hay otra agenda
en debate: El cuestionamiento del modelo económico implementado desde Fujimori
y puesto en piloto automático por todos los gobiernos de turno incluido el
actual.
El
extractivismo es antidemocrático
La
democracia no se define solo por la legitimidad constitucional-representativa,
ni sólo por la separación y el ejercicio autónomo de los poderes del
Estado. Gobiernos legítimos, elegidos
con el voto popular, pueden seguir la práctica de someter a sus críticos u
opositores, de facilitar la concentración de la riqueza, de permitir la
posición de dominio y el abuso del poder, de discriminar y no tomar en cuenta a
los pueblos indígenas, y de despreciar las condiciones de vida y los niveles de
ingreso de los trabajadores. Y, en este caso, claro está, estamos frente a
gobiernos antidemocráticos; frente a gobiernos que no practican la democracia
republicana y que, por lo tanto, no evitan el dominio de unos sobre otros ni
les importa la pérdida del ejercicio de la libertad por
la ausencia de condiciones materiales de existencia.
Las
instituciones políticas no democráticas son oligárquicas, concentran el poder
en «pocas manos» y evitan la aplicación de restricciones al ejercicio de este
poder. Estas instituciones políticas son las que generan instituciones
económicas funcionales a los intereses de la oligarquía, es decir, son las que
extraen recursos del resto de la sociedad para su propio beneficio. En nuestro
país, la presencia de este tipo de instituciones políticas y económicas
«extractivas» --como las denomina Acemoglu-(1)-, ha sido una constante desde la
colonia. Este «extractivismo» siempre fue rentista y poco innovador; se mantuvo
sobre la base del aprovechamiento de la renta de los recursos naturales por las
respectivas oligarquías que se sucedieron en el tiempo. Nos hizo –en momentos
distintos de nuestra historia—un país guanero, salitrero, cauchero, azucarero,
algodonero, «productor» de anchoveta, petrolero y minero, es decir, un país
primario exportador que miraba sólo a los mercados externos. El «extractivismo»
creó un Perú Oficial que marginó,
excluyó y empobreció al Otro Perú de
la sierra, de la selva y de las barriadas de la costa del país.
Pero demos un ejemplo actual -el petróleo, el precio
internacional del petróleo está en US$ 104 por barril y podría saltar a US$
150. El MEF dijo que, de aumentar a US$ 115 por barril, se requerirían S/.
2.000 millones adicionales para el Fondo de Estabilización del Precio a efecto
de evitar el alza del costo de las gasolinas y del transporte y los alimentos.
Pero producir un barril de petróleo cuesta mucho menos. En Bolivia, producir un barril cuesta US$ 5,77 dólares, menos del 6% de lo que paga Petroperú por barril. Y es que, gracias a Fujimori, Petroperú no cuenta más con pozos petroleros propios y debe comprar el petróleo pagando el precio internacional de US$ 104 por barril. En México, el costo de Pemex era, en el 2007, de US$ 4,36 por barril y en Petroecuador es de US$ 5,30 el barril, aunque en el 2009 llegó a costar US$ 8,79 producir un barril, es decir, US$ 95 menos de lo que tiene que pagar actualmente Petroperú por cada barril que compra para su refinería.
¿No es un absurdo que se privatizara Petroperú y tengamos que comprar lo que consumimos a precio internacional? Existe peruanos como Basadre que pensó al Perú como posibilidad, pero hay otros que lo ven como un botín – esperando la oportunidad de saquearlo, como sucedió en el tiempo de Fujimori. Una mirada al Perú con prismas diferentes.
Pero producir un barril de petróleo cuesta mucho menos. En Bolivia, producir un barril cuesta US$ 5,77 dólares, menos del 6% de lo que paga Petroperú por barril. Y es que, gracias a Fujimori, Petroperú no cuenta más con pozos petroleros propios y debe comprar el petróleo pagando el precio internacional de US$ 104 por barril. En México, el costo de Pemex era, en el 2007, de US$ 4,36 por barril y en Petroecuador es de US$ 5,30 el barril, aunque en el 2009 llegó a costar US$ 8,79 producir un barril, es decir, US$ 95 menos de lo que tiene que pagar actualmente Petroperú por cada barril que compra para su refinería.
¿No es un absurdo que se privatizara Petroperú y tengamos que comprar lo que consumimos a precio internacional? Existe peruanos como Basadre que pensó al Perú como posibilidad, pero hay otros que lo ven como un botín – esperando la oportunidad de saquearlo, como sucedió en el tiempo de Fujimori. Una mirada al Perú con prismas diferentes.
Notas
(
(1)
Daron
Acemoglu, economista MIT(Massachusetts Institute of Technology ) co –autor del libro:
¿Por qué fracasan las naciones?
(2)
MEF:
Ministerio de Economía y Finanzas.
Director
Grupo Editor del Norte *