miércoles, 18 de mayo de 2011

Crecimiento Económico: lento muy lento

Lucio Agustín Torres *

La administración Obama está dispuesta a hacer todo lo posible por conseguir garantizar el crecimiento de la economía estadounidense.
La Casa Blanca parece haberse olvidado que el Acto de Recuperación e Inversión Económica aprobado en febrero del año pasado, todavía no ha impactado de lleno en el país. De hecho, según datos de la publicación Pro Publica, el 35% de los 787.000 millones de dólares de dicho estímulo no se han gastado o están a la espera de aportar su granito de arena a la maltrecha recuperación de EEUU.
Un total de 278.000 millones de dólares podrían ser utilizados por el gobierno estadounidense de aquí a que finalice el año, Sin embargo, pese a este hecho y las nuevas medidas anunciadas por el presidente de EEUU desde Ohio, una encuesta realizada por la agencia Reuters entre 70 economistas apunta que los expertos han rebajado menormente sus expectativas de crecimiento para la economía de EEUU durante la segunda mitad del año.
En el tercer trimestre del año el PIB norteamericano crecerá alrededor de un 1,8%, sólo dos decimas más que el trimestre anterior. En lo que respecta a los tres últimos meses del año, cuando el resto del dinero del plan de estímulo debería hacer efecto, la economía sólo crecerá un 2,1%. En el conjunto de 2010 la expansión de la economía de EEUU alcanzaría el 2,7%. Estas cifras distan de las previstas por los economistas el pasado mes de agosto, cuando esperaban un crecimiento de la economía en el tercer trimestre del 2,4% y del 2,5% en el último trimestre del año.
De otro lado la discusión económica se centra en la enorme deuda de los EE.UU. El que fuera economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), Simon Johnson, advertía a la administración Obama que debe tener cuidado con su déficit presupuestario.
¿Y cómo puede suceder esto?, muy sencillo. Según explicó Johnson en el New York Times, "si algunos países de la eurozona consiguen que su deuda sea más apetecible durante los próximos 12 o 24 meses eso podría reducir el apetito por la deuda norteamericana entre los inversores, tanto estadounidenses como internacionales".Con este panorama sobre la mesa, Johnson apuntó que dicha situación podría disparar los tipos de interés a largo plazo, algo que afectaría a la inversión dentro del sector privado y encarecería la financiación de déficit presupuestario. No hay que olvidar que desde que la crisis de deuda comenzó a sobrevolar el Viejo Continente, el mercado de bonos del Tesoro estadounidense se ha convertido en el refugio de muchos inversores. Sin embargo algunos apuntan que el mercado de bonos ha vivido un rally alcista durante los últimos tiempos que nada tiene que ver con la situación vivida en Europa, por eso, sus intereses viven una tendencia bajista que no tiene por qué cambiar aunque la recuperación europea siga adelante.
Las cifras hablan por sí solas y desde luego no dejan en buen lugar al presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Durante los 19 meses que lleva en el cargo, el mandatario ha sumado un total de 2,52 millones de dólares a la deuda federal en manos del público. Ésta asciende a 8,93 billones de dólares a 7 de septiembre de 2010, según los datos oficial del Departamento del Tesoro. Este importe no incluye la deuda intergubernamental. Si se incluyese, la deuda total del país asciende a 13,43 billones. Es decir, si echamos cuentas, es mucho más que el total acumulado por todos los presidentes del país desde George Washington a Ronald Reagan, según demuestran los datos del gobierno recopilados por CNS News. Así, al cierre del año fiscal de 1989, que finalizó ocho meses después de que el presidente Reagan abandonase el Despacho Oval, la deuda federal total acumulada en manos del público era de 2,19 billones de dólares, según la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés). Eso quiere decir que desde la administración Washington a la de Reagan era de 335.300 millones de dólares menos que la añadida por el presidente Obama desde el pasado 20 de enero de 2009 hasta agosto.
La exposición de Obama a los medios supone un cambio de tendencia respecto a los meses anteriores, en los que la recuperación empezó a debilitarse (el PIB creció un 1,6% en el último
trimestre, menos de lo esperado) y hasta la Reserva Federal pidió ayuda al Gobierno porque ella sola no puede solucionar todos los problemas. El cambio de actitud de la Casa Blanca se produce, además, en un momento peligroso para el presidente, cuyo partido, los demócratas, tiene ante sí una dura reválida electoral. El próximo noviembre los comicios legislativos renovarán el Congreso y el Senado y Obama puede perder la amplia mayoría que tiene hoy si se cumplen los sondeos. Este proceso electoral, a su vez, puede paralizar la sesión parlamentaria, en un momento en que el Gobierno está intentando sacar adelante su agenda para estimular la economía. Los congresistas demócratas temen que cualquier decisión de Obama afecte a sus escaños y los republicanos, en la oposición, quieren sacar el máximo rendimiento a la débil coyuntura económica. Así están las cosas en estos momentos, una deuda incrementada día tras día y un crecimiento económico lento muy lento.

Director de Blogs Alternativos *

PUBLICADO 11 SETIEMBRE 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si deseas expresar tu punto de vista, escribenos a nuestro correo : editordelnortegroup@gmail.com.